jueves, 7 de febrero de 2008

Consumidores y agricultores se alían contra los márgenes comerciales

MAITE VÁZQUEZ DEL RÍO
MADRID. «Las cuentas no nos salen», explicó ayer a ABC el secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA-UGT), Lorenzo Ramos, tras reunirse con una delegación del Consejo de Consumidores encabezada por su presidenta Francisca Sauquillo. El fin de esta reunión fue buscar una salida al problema de los márgenes comerciales ante el permanente aumento de los precios de los alimentos.
Ramos explicó a los consumidores la grave situación que atraviesa el sector, ya que en origen los productos siguen bajando, mientras que al consumidor la cesta de la compra le sale cada vez más cara. Si a esto se une la subida del precio de los piensos (10 céntimos de euro por kilo), el resultado es que «no es rentable» mantener una explotación ganadera y muchas granjas de porcino, ovino o de vacuno «han empezado a desaparecer», asegura Ramos.
«Con los datos en la mano -continúa explicando el dirigente de UPA- hay especulación y todo el mundo se está aprovechando» de la situación provocada por el encarecimiento de las materias primas (cereales, sobre todo) y del precio del petróleo. «Las ayudas que están llegan al sector son un parche», dijo Ramos.
De momento, agricultores y consumidores han decidido aliarse y sumarse a las denuncias interpuestas ante la Comisión Nacional de la Competencia. Su siguiente paso va a ser presentar ante la Fiscalía General del Estado todos los casos irregulares detectados.
Tras las elecciones del 9-M, agricultores y consumidores pedirán al Gobierno que resulte elegido la elaboración de una ley que regule los márgenes comerciales.
ABC, Viernes 8 de febrero de 2008

1 comentario:

Anónimo dijo...

Este tema nos afecta a todos los consumidores, ya que los intermediarios se están aprovechando de la subida de los precios de los alimentos aumentando su margen de ganancia. Si a esto le sumamos la subida de los precios de las materias primas, los principales perjudicados somos los consumidores y los agricultores.
Si seguimos así, no van a quedar explotaciones ganaderas o agrícolas, ya que en vez de obtener algún benefício, lo único que obtienen son pérdidas.
El problema, además de no obtener ganancias, es que no tienen casi ayudas para poder subsistir, y lo que no podemos permitir es que se termine un sector tan importante para la economía española como es éste.