jueves, 30 de julio de 2009

Los precios aumentan su descenso al 1,4% en julio, según el IPCA

EUROPA PRESS

El Indice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) en España aumentó cuatro décimas su caída en julio y situó su tasa interanual en el -1,4%, con lo que cierra cinco meses en tasas negativas, según el indicador adelantado elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En concreto, el IPCA entró por primera vez en negativo el pasado mes de marzo. En toda la serie histórica de este indicador, que arranca en enero de 1997, no se había registrado nunca una tasa negativa. La tasa anual del IPC armonizado suele coincidir -apenas varía en alguna décima- con la del IPC general, cuya evolución del mes de julio se publicará el próximo 13 de agosto.
De situarse el IPC general en el -1,4%, la inflación interanual española ahondaría también su crecimiento negativo, ya que en junio registró una tasa del -1%. En marzo la inflación española entró por primera vez en negativo, pues desde 1961, año en el que se inicia la serie, nunca se había experimentado una tasa negativa de crecimiento de los precios.
No obstante, el Gobierno sigue descartando la entrada en deflación, entendida ésta como una caída generaliza y prolongada de los precios, opinión que también comparten el Banco de España y organismos como la Fundación de las Cajas de Ahorro (Funcas). La institución gobernada por Miguel Angel Fernándes Ordóñez ha manifestado que los riesgos de deflación en España son "remotos", puesto que sólo el efecto estadístico por el abaratamiento del crudo en la segunda mitad de 2008 presionará al alza el IPC hasta tasas positivas en los últimos meses del año.
Por su parte, Funcas prevé que la inflación registre tasas negativas hasta octubre, con lo que acumularía ocho meses de crecimiento negativo. No obstante, la Fundación de las Cajas considera que no se puede hablar de deflación mientras el núcleo inflacionista, que excluye los productos energéticos y los alimentos, se mantenga en positivo.
En este sentido, Funcas estima que el IPC subyacente, que es la tasa que más fielmente refleja las tendencias inflacionistas de la economía, se mantendrá en positivo en lo que resta de año, aunque por debajo del 1%. Desde julio de 2008, cuando tocó un techo del 5,3%, el IPCA ha descendido casi 7 puntos, coincidiendo con la tendencia a la baja del precio del petróleo y con el abaratamiento de algunos alimentos. Precisamente, hace un año, en julio de 2008, la tasa interanual del IPCA estaba en el 5,3%.
El IPC armonizado, que sirve después a Eurostat para incorporarlo al cálculo del índice de inflación en la Unión Europea, proporciona un avance de cómo evolucionaron los precios en España durante el mes de julio. El dato definitivo se conocerá el 13 de agosto.


EL PAÍS, Jueves 30 de julio de 2009

El 30% de los españoles corre riesgo de deshidratarse

AQUILINO GARCÍA PEREA
VOCAL DE ALIMENTACIÓN / CONSEJO GENERAL DE COLEGIOS OFICIALES DE FARMACEÚTICOS

En verano aumenta el riesgo de deshidratación. La exposición a temperaturas ambientales elevadas pueda provocar, entre otras cosas, pérdida de agua y electrolitos. Las vacaciones también puedan suponer un factor de riesgo: las gastroenteritis, las diarreas del viajero, el uso del aire acondicionado que reseca el ambiente, etc. son causa frecuente de deshidrataciones.
Una correcta hidratación es fundamental en estas fechas pero, aún más para los grupos de población más vulnerables: un 30 por ciento de la población española – 14 millones de personas, entre ancianos, deportistas, embarazadas, niños, enfermos, trabajadores al aire libre, etc. – está en situación de riesgo de sufrir deshidratación. Sin embargo, estudios realizados por el Observatorio de Hidratación y Salud (OHS ) ponen de manifiesto que, en general, los españoles no están suficientemente informados y, en consecuencia no se tratan adecuadamente.
Para prevenir los efectos de las altas temperaturas y de la deshidratación en la salud, se pone en marcha la campaña ¡No te deshidrates!. La iniciativa está promovida por el OHS con el respaldo del Ministerio de Sanidad y Política Social y el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de España (COCOF). El objetivo es difundir la importancia de mantener una buena hidratación, ya que de lo contrario, sobreviene el cansancio, el dolor de cabeza, la dificultad de concentración y malestar. Puede afectar negativamente al rendimiento mental y contribuye a empeorar algunas enfermedades.
EL ALIADO
Durante el desarrollo de la campaña, entre los meses de julio y septiembre y bajo el lema “Hay mil formas divertidas de hidratarse”, farmacéuticos de toda España realizan un asesoramiento personalizado en las farmacias con el apoyo de materiales informativos para la población, además de dirigirse especialmente a los colectivos más vulnerables. También hay información y vídeos divulgativos a través de la web: http://www.hidratacionysalud.com/. El farmacéutico, como profesional sanitario más cercano a la población, cumple un papel fundamental para mejorar la información y aconsejar hábitos saludables. No hay que olvidar que el 99 por ciento de la población tiene una oficina de farmacia en el fugar donde reside y que diariamente visitan las farmacias más de dos millones de ciudadanos.
Por ello, desde la farmacia se aconseja:
- Beber de dos a tres litros de líquido al día de manera continua y en pequeñas cantidades;
- Si se realizan actividades y esfuerzos físicos, conviene aumentar estas cantidades y vigilar las pérdidas a través del sudor;
- Llevar siempre a mano una botella de bebida que nos recuerde la necesidad de beber;
- No confiar únicamente en la sensación de sed, ya que puede aparecer cuando existe cierta deshidratación;
- Ingerir variedad de bebidas: agua, infusiones, refrescos, zumos, lácteos, etc. El distinto sabor ayuda a beber lo necesario;
- Ingerir alimentos ricos en agua (frutas, verduras y hortalizas);
- Evitar el consumo de alcohol, tienen efecto diurético;
- En épocas de calor intenso mantenerse en un ambiente fresco y ventilado;
- Vigilar la adecuada ingesta de líquido de los más vulnerables a la deshidratación (ancianos, deportistas, trabajadores al aire libre, etc.)
En caso de duda, consultar al farmacéutico.
A TU SALUD – LA RAZÓN, Domingo 26 de julio de 2009

La cultura del despilfarro tardará en volver

AMANDA MARS

"No tengo ni idea de lo que puede pasar, pero yo creo que de la crisis saldrá un consumidor diferente, con otra actitud. Hemos tocado una pared. Ahora tiene más valores, y va a ser un poco más austero, también porque va a haber menos riqueza. Pero, al mismo tiempo, será selectivo y en algunos productos siempre estará dispuesto a gastar dinero. Por ejemplo, abrir un iPod es casi un acto de amor, es tan bonito, uno se guarda hasta la caja...".
Piensa en voz alta Toni Segarra, un creativo publicitario que se dedica a pensar historias fabulosas, que caigan bien a la gente y, a la postre, animen a comprar unos productos en lugar de otros. Para el fundador de la agencia SCPF, el que preguntó a los españoles ¿Te gusta conducir? y fundó La república independiente de tu casa, las cosas han cambiado. "Todo ese mileurismo del que se habla se va a quedar en la sociedad y va a haber menos poder adquisitivo, de ahí ha nacido el low cost, para atender a toda esa gente".
Cuando un publicitario habla así, es porque algo ocurre en el mercado. Los españoles han pasado de la euforia al pánico en el consumo, se han entregado al fenómeno del bajo coste y han empezado a ahorrar en pequeñas cosas, como comer en casa o llevarse la fiambrera al trabajo (esto, por ejemplo, ha crecido un 8% en un año).
Unas costumbres se quedarán y otras se olvidarán tan rápido como resucite la economía. Pero economistas y sociólogos coinciden en que hay un punto de inflexión en los hábitos, y aunque el hedonismo sobreviva tozudo, empieza a beber de nuevas fuentes, en el idioma económico, de nuevas oportunidades de negocio.
La reflexión irrumpe en la resaca de la fiesta económica. La espiral de consumismo, de acumulación de bienes en un país maravillado con su explosión económica se refleja en cómo entre 2005 y 2007 brotaron como setas los centros con cientos de trasteros de alquiler de entre dos y 25 metros cuadrados, conocidos con el anglicismo de self storages. La gente se lanzó a alquilarlos porque sus posesiones crecían y no tenían espacio en viviendas que, al mismo tiempo, eran cada vez más pequeñas y más caras. Esta disfunción dibuja muy bien la distorsión económica que ha vivido España. Barcelona vio abrir una decena de estos grandes centros en apenas dos años y en Madrid su precio de compraventa se duplicó entre 2002 y 2006.
"La psicosis durará seguramente más que la crisis, así que vamos a ver un consumidor más prudente en el futuro. Ahora va a haber una bajada de la renta disponible de las familias que luego se recuperará, el consumo también, pero desde luego no se va a repetir una etapa tan expansiva como la de los últimos 10 años, el escenario será más contenido", dice Xavier Segura, jefe del servicio de estudios de Caixa Catalunya.
La entidad ha previsto para este año la primera caída de la renta de las familias en 15 años. En concreto, prevé un descenso de un 2,7% en términos nominales (es decir, sin contar el efecto que tienen las oscilaciones de los precios de las cosas) y el 2,3% en términos reales, considerando la inflación. Y la tasa de ahorro de los hogares es precisamente ahora, en pleno declive, cuando no deja de crecer.
Se trata, en resumen, de que habrá menos dinero para gastar durante algunos años. Pero también, según el profesor de IESE José Luis Nueno, menos necesidad de hacerlo después de una época de aprovisionamiento de casi todo. Como si de empresas se tratara, los españoles han acumulado stocks de múltiples bienes en los últimos años que ahora se tendrán que agotar antes de ser repuestos.
Nueno, experto en consumo, realiza unas pruebas de mercado en las que se cita en casas particulares para auditar sus posesiones. "Les decimos que sólo les queremos entrevistar y miramos sin avisar lo que guardan en los armarios: encontramos piezas por duplicado, triplicado... Prendas de ropa con las etiquetas, sin estrenar", explica sorprendido. "¿Va a volver el consumidor a ser como era? Probablemente no, porque nos han tirado un jarro de agua fría por encima. Éramos un milagro económico y ya no, pero el gasto volverá en cierto punto".
El placer más o menos efímero que el consumo genera no tiene visos de desaparecer, pero el consumismo no es algo consustancial a la persona, "es consustancial a nuestro sistema económico, que sólo puede sustentase sobre una sociedad que nunca deje de comprar", se apresura a matizar el psicólogo Javier Garcés.
Cuando comenzó la sociedad de bienestar, las teorías humanistas de los años cincuenta y sesenta pronosticaban que el ser humano aumentaría y aumentaría su consumo hasta un límite, superado el cual empezaría a bajar su ritmo de adquisición de bienes y servicios y empezaría a preocuparse por otras cosas. "Ahora todo esto nos parece absurdo, pero entonces no lo era. No se puede pronosticar el futuro", apunta Garcés. Lo que sí sostiene es que la debacle económica, con la cota de más de cuatro millones de parados, ha tenido un efecto traumático para todos los consumidores, estén o no afectados por la crisis, y su perfil no volverá a ser el mismo.
José Luis Nueno, por ejemplo, destaca un nuevo prejuicio hacia el gasto, la ostentación y el lujo en esta crisis. "Por ejemplo, ¿cómo te cambias el coche si en tu empresa están echando a 20 trabajadores, no lo haces. Hay mucha gente que no pasa penurias, pero ha dejado de darse caprichos, por eso el lujo está sufriendo tanto. Ahora, lo más cool es ir de otra cosa", apunta.
La dialéctica entre austeridad y despilfarro es una constante en los ciclos económicos, por ello el consumo creció un 3,8% en 2007, sólo avanzó un 1,4% en 2008 y ha empezado a bajar. Pero el giro que ha dado el consumidor español en los últimos años también tiene algo de estructural. Tal y como apunta Josep Francesc Valls, el ciudadano "ha aprendido a comprar los productos más baratos. Cuando viene de una época de crisis, el aprendizaje dura muchos años y las empresas van a tener que aportar cada vez más valor a precios más ajustados".
Ello explica, por ejemplo, que la cuota de mercado que tienen los productos de marca blanca en los supermercados españoles haya escalado hasta el 32%, o que, de todos los pasajeros de aviones que han pasado por en España el pasado mes de junio, el 51,7% lo haya hecho en aerolíneas de bajo coste, 2,6 puntos más que en el mismo mes del año pasado.
Una parte del hábito de ahorro se queda. En Barcelona, ha ocurrido con el consumo de agua. Cuando una severa sequía acosó la provincia el año pasado, la comunidad se concienció lo suficiente como para reducir su consumo de agua y se adoptaron medidas de emergencia. Ha llovido bastante desde hace un año, en sentido literal, y la alarma ha pasado, pero muchas de las fórmulas adoptadas se mantienen. El gasto de agua ha bajado de 110 a 109 litros de media por ciudadano y día.
Lo recuerda Albert Vinyals, profesor de Psicología Social del Consumo de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), para remarcar que "vamos a adaptar muchas de las nuevas pautas de consumo que hemos adquirido con la crisis".
La compra semanal, la del súper, por ejemplo, "es mucho más planificada". El profesor ha elaborado un estudio de tendencias para Caprabo que revela que el consumidor ha vuelto a "unos hábitos más racionales y responsables, haciendo compras más pequeñas, aunque sean más frecuentes, con menos productos superfluos, y recuperando la práctica de la lista de la compra", que ayuda a evitar la adquisición impulsiva.
Aun así, Vinyals está convencido, como el profesor de Esade Josep Francesc Valls, y como el publicista Toni Segarra, de que ciertos "productos clave" siempre se harán un hueco en las prioridades de los ciudadanos, tengan más o menos poder adquisitivo. "Porque son los productos que aportan más valor añadido, más relacionados con la búsqueda de placer", apunta Vinyals.
Artilugios como los iPod, los iPhones o las consolas Wii han triunfado en el mercado español como estragos ha hecho la recesión económica. En plena crisis, en julio del año pasado, Telefónica lanzó el modernísimo teléfono iPhone de la marca Apple y se desató la locura: miles de fans de esta tecnología hicieron cola para adquirir uno el primer día en que se pusieron a la venta. Se acabaron las existencias en muchas de las tiendas. Sus ventas globales han superado las expectativas.
Pero, salvo los pequeños tesoros fabricados por la industria del marketing, en todo lo demás, las familias, o los individuos, son hoy mucho más recelosos. "El consumidor se ha dado cuenta de que ha estado pagando las cosas a unos precios que no eran los adecuados y ahora es mucho más exigente. El pequeño comercio ha oído este mensaje", opina Miguel Ángel Fraile, secretario general de la Confederación de Comercio de España.
Por ello, esta sensación de "rebajas continuas" que ha creado en el sector con la campaña de promociones y descuentos que han estado aplicando durante todo el año, con el fin de animar las ventas en un momento de caída del consumo, quedará de alguna manera en las estrategias de los comerciantes. "A partir de ahora va a haber menos diferencias entre la época de rebajas y la que no lo es, hay un cambio de paradigma", opina.
Pero el gran cambio de esquema, el fin de la cultura de consumo, parece improbable. Al menos, si depende de giros sociológicos o ideológicos. Javier Garcés opina que "este modo de vida puede cambiar por cuestiones de necesidad, porque se acaben los recursos o porque mantener este tren de consumo sea insostenible en el planeta, pero no hay ningún movimiento revolucionario de los jóvenes por cambiarlo pese a la existencia de algunas plataformas o iniciativas como el Día sin Compras".
Al revés, apunta que el hábito del consumo se ha extendido a otras áreas, como las relaciones personales.
Y eso que el consumo, el dinero, no generará felicidad si uno ya tiene cubiertas sus necesidades básicas. Hay estudios económicos que se han dedicado a investigarlo, como el elaborado en 2007 por Manuel Baucells, profesor de la escuela de negocios IESE, y Rakesh K. Sarín, de la UCLA Anderson School of Management de la Universidad de California. La investigación cifraba en 15.000 dólares (unos 10.700 euros) los ingresos mínimos para ser feliz. A partir de ahí, el poder adquisitivo y felicidad no crecen al mismo ritmo. Otro estudio de Brickman, Coates y Janojj-Bullman señala que aquellos a los que les toca la lotería sólo experimentan un incremento de felicidad el primer año, mientras que los siguientes se mantienen igual porque ya no experimentan ningún cambio de escalón.
Todos estos datos se estrellan contra los armarios llenos de prendas sin estrenar con los que se encuentra el profesor Nueno en sus estudios de mercado. Porque la sociedad hedonista, la doctrina que proclama el placer como fin supremo de la vida, vaticina Vinyals, "va a seguir, y buscará ese placer consumiendo, aunque puede ser distinto, viajando, haciendo cursos de ganchillo, incluso, pero seguirá".
EL PAÍS, Jueves 30 de julio de 2009
Imagen: El País

miércoles, 29 de julio de 2009

El precio de la leche subirá en origen y para el consumidor

VIDAL MATÉ – Madrid
Los precios de la leche experimentarán una subida desde el próximo mes de ahosto con base en el compromiso suscrito la semana pasada entre el sector agrario, las industrias y los grandes grupos de distribución. Este incremento de los precios dependerá del grado de cumplimiento del acuerdo firmado, que será vigilado por una comisión de seguimiento presidida por un alto cargo del Ministerio de Agricultura y que tiene como objetivo no penalizar a los productores de leche.
En lo que afecta a los ganaderos, la subida de los precios en origen se podría situar en un 10%. Frente a unos precios medios percibidos por el sector en los últimos meses de entre 0,27 y 0,29 euros litro, según zonas, las nuevas cotizaciones medias, según ese acuerdo, se elevarán a un mínimo de entre 0,31 y 0,32 euros litro.
La nueva cifra se desglosa en 0,28 euros como precio de referencia de la interprofesional francesa y unos tres céntimos por el coste que tendría el transporte de esa leche hacia un punto medio en España.
Este incremento de los precios en origen pagados por las industrias, se traducirá también, según otros puntos de ese acuerdo, en subidas de los precios al consumidor.
Los grandes grupos de distribución se han comprometido a adquirir leche a industrias que hayan comprado la materia prima en el marco de las nievas cotizaciones marcadas en el acuerdo. En la actualidad, una parte de esa leche se ha llegado a adquirir a menos de 0,20 euros litro. Pero además hay otras razones que impulsarán la subida de los precios de la leche.
La distribución aceptó además que la leche deje de ser utilizada como el producto reclamo a precios bajos que ha sido en el último año para atraer a los consumidores frente a la crisis.
Finalmente, otro de los compromisos del acuerdo por parte de los grandes grupos de distribución es reducir las fuertes diferencias de precios que hay en la actualidad entre las marcas de fabricante y las marcas propias. Los industriales se habían quejado ante la distribución de que en otros países comunitarios la diferencia entre los precios de unas y otras marcas eran mínimas, mientras en España eran muy amplias para apoyar la venta de las marcas de la distribución.
Para el responsable de las industrias lácteas, Luís Calabozo, como parte media de la cadena, se trata de un acuerdo positivo para lograr un equilibrio entre los intereses de todas las partes. El acuerdo puede ser el inicio de una nueva política en el sector agrario vía las interprofesionales y los contratos homologados.


EL PAÍS, Lunes 27 de julio de 2009

Leche versus Coca-Cola

CESAR LUMBRERAS

En estos momentos debería resultar mucho más barato tomarse, en los bares y restaurantes, un vaso de leche que una Coca-Cola. En los supermercados, la mayoría de las leches, sobre todo las llamadas de marca blanca, cuestan menos que la misma cantidad del citado refresco. Cualquiera puede hacer la comprobación en la tienda a la que acuda habitualmente. La comisaria de Agricultura puso el dedo en la llaga la semana pasada, durante la presentación de la Comunicación que habían pedido los Jefes de Estado y de Gobierno de la UE, cuando lamentó que los consumidores europeos no tengan conciencia de lo que cuesta producir un litro de leche, no del momento por el que atraviesan los ganaderos. Mariann Fischer también se quejó de que muchos de esos consumidores busquen una leche barata y, al mismo tiempo, no les importe pagar más por los refrescos, como el que da título a este comentario. La situación de crisis por la que atraviesa el sector lácteo español y comunitario va a dejar en la cuneta a muchos ganaderos, que tendrán que abandonar sus explotaciones. Por eso no sería de extrañar que dentro de unos meses se dé la vuelta a la tortilla y nos encontremos en una situación de falta de oferta de leche de vaca y los precios suban y suban. Entonces los consumidores nos quejaremos de lo caro que es este producto. Bueno será pararse a reflexionar sobre lo que cuesta producir un litro de leche: hacen falta las instalaciones de las granjas, las vacas, los ganaderos, el camión que recoja el producto, las fábricas para transformarla y envasarla y, finalmente, llevarla al punto de distribución. Hecho esto, comparemos ese proceso con el de elaboración de un refresco o gaseosa y, cuando vayamos a la compra, hagamos lo mismo con los precios de estos últimos y de la leche. Por una vez la comisaria ha estado acertada en el ejemplo. Claro que, por otro lado, ella tampoco hace mucho por solucionar la crisis.


LA RAZÓN, Lunes 27 de julio de 2009

jueves, 16 de julio de 2009

Denuncian a 23 aerolíneas por engaños en la compra 'on line'

ADELAIDA DE LA PEÑA
Toda precaución a la hora de comprar un vuelo por internet es poca a la luz de los datos hechos públicos ayer por la Facua-Consumidores en Acción, que informó de la denuncia a 23 aerolíneas por no cumplir unos parámetros mínimos tanto europeos como estatales.
El portavoz de la organización, Rubén Sánchez, aportó los datos de un estudio sobre 33 aerolíneas, de las que sólo diez cumplían los cinco parámetros considerados en el análisis: anunciar precios inferiores a los reales, cobrar por pagar con tarjeta o llevar maletas, añadir servicios opcionales como preseleccionados en sus portales de internet y tener en castellano la información relevante para el consumidor.
Entre las ilegalidades detectadas, Sánchez destaca que "19 cobran un recargo por pagar con tarjeta", por lo que encarecen los precios en el momento en que el usuario abona el billete, recalcó el portavoz de esta organización de consumidores, quien matizó que "en muchas ocasiones ni siquiera hay otra forma de pago". Cobrar el equipaje también está prohibido por la Unión Europea y por las leyes españolas desde los años 70, sin embargo, "16 de las aerolíneas optan por esta práctica que puede encarecer el precio de un viaje internacional entre 15 y 24 euros", según Sánchez.
Estar despistado mientras se reserva en la web puede costar la contratación involuntaria de servicios opcionales. Es el caso de los seguros secundarios de viaje, la comida o incluso donaciones, que en ocho de las 33 compañías analizadas tienen en sus páginas esta opción marcada por defecto.
Entre las aerolíneas denunciadas más conocidas están Vueling y Ryanair por cobrar por usar tarjeta y por maleta embarcada, así como por cargar un precio superior al anunciado. Air Berlin y EasyJet por su parte, también están en la lista por incumplir otros requisitos. Sánchez tachó de "flagrantes" algunas de estas ilegalidades porque "muchas hace tiempo que están denunciadas y continúan igual, pero lo peor es que en algunos parámetros incluso han empeorado las condiciones cuando unas compañías han visto que a otras les ha ido bien"."La clave está en las administraciones públicas", explicó el portavoz, quien matizó que, aunque la culpa es de las aerolíneas, "no se pueden aplicar sanciones de los años 70 a compañías que ponen precios del siglo XXI" porque es un ejemplo de impunidad para el resto. Facua denunció además al Ministerio de Fomento porque "está haciendo dejadez de funciones", ya que estos asuntos son "clara competencia" de esta cartera y amenazó con llevar al tribunal de Bruselas su queja sobre el incumplimiento por parte del Gobierno de las normas comunitarias y estatales "si continuamos notando la pasividad de las autoridades".
Por último, animó a los consumidores a hacer presión y denunciar las irregularidades que detecten durante este periodo vacacional.


DIARIO DE SEVILLA, Jueves 16 de julio de 2009
Imagen: Diario de Sevilla

¿Qué hacer si el hotel no tiene la prometida habitación con vistas?

S.GONZALO – MADRID
¿Quién no ha devorado el pan con mantequilla previo al almuerzo pensando que era cortesía de la casa para descubrir luego que el restaurante se lo ha cargado en la cuenta? ¿O quién no ha puesto el grito en el cielo al comprobar que por una jarra de agua de grifo ha pagado cadi tanto como por la mejor botella de agua mineral? Éstas son algunas de las reclamaciones que a diario recibe la Dirección General de Consumo con motivo de la temporada estival (20.000 consultas y quejas en lo que va de año, el doble que en el mismo periodo de 2008).
“¿Qué puedo hacer si en el hotel me prometieron una habitación con vistas y he amanecido de cara a un lodazal?”, bien podría ser una de las muchas consultas a las que intentan dar respuesta desde el teléfono de información de la Comunidad, 012.
Pero si carece de un contrato o de un documento escrito que acredite ese compromiso, tiene muy poco que hacer. Por el contrario, si es de los que ha pagado por el pan o de los que ha tenido que abonar por un vaso de agua corriente debe saber que puede reclamar la devolución de esos importes siempre y cuando estos conceptos no figuren en la carta del establecimiento con sus correspondientes precios.
Puestos de mercadillo
Los productos adquiridos en la venta ambulante (algo que se dispara en verano) no están exentos de posibles reclamaciones. Si es de los que se compra la ropa interior, los complementos o la billetera en un mercadillo debe saber que ante cualquier desperfecto puede exigir la hoja de reclamaciones (que deben entregarle obligatoriamente).
No obstante, si algo concentra estos días la preocupación de los consumidores son también las quejas por los desperfectos en los equipajes y maletas en las estaciones y los aeropuertos. Si le pasa o, es más, le extravían sus pertenencias, sepa que tiene derecho a una indemnización.
¡Ojo con el arreglo del vehículo!
Muchos talleres de reparación de coches hacen su particular agosta a costa de los incautos que tienen la mala suerte de sufrir una avería fuera de su domicilio habitual. Según explicó la directora general de consumo, Carmen Martínez de Sola, es demasiado frecuente encontrar en la factura final reparaciones no incluidas en el presupuesto. Y especialmente problemáticos son los desperfectos en los coches de alquiler, ya que el cliente tendrá que demostrar que el arañazo ya existía cuando lo alquiló. Si no, tendrá que pagarlo.

20 MINUTOS, Jueves 16 de julio de 2009

martes, 7 de julio de 2009

Así se hace una hamburguesa. McDonald´s invita a los consumidores a conocer los entresijos de su fábrica de Toledo

TATIANA FERRANDIS
No hace falta ser un devorador de hamburguesas para tener una curiosidad voraz por conocer los entresijos de una de las fábricas de esta cadena de “fast food” con presencia en ciento veinte países. McDonald´s organiza visitas guiadas a sus clientes para ver las instalaciones de ESCA Food Solutions en Toledo, así que si le apetece ser uno de sus “testigos de calidad”, saber dónde y cómo se elaboran las hamburguesas que comemos en los locales de España y Portugal, puede inscribirse en la página web http://www.ingredientesdeverdad.com/.
Sin aditivos.
Sepa que para recorrer la planta es obligatorio el uso de un mono, así como llevar mascarilla, gorro, patucos, que cubren los zapatos, y pasar con las manos perfectamente desinfectadas. El consumidor comprueba aquí que las hamburguesas son cien por cien carne de vacuno procedente de las granjas de la UE, sobre todo, de explotaciones de nuestro país. En cuanto a las piezas seleccionadas, son los cuartos delanteros y las faldas deshuesadas a mano sin añadir aditivos, conservantes ni colorantes. Según la legislación, este tipo de elaboraciones no debe de tener más de un 20 por ciento de grasa. Así, al terminar, por ejemplo, una partida de carne picada, unos sensores la analizan y establecen el porcentaje que posee. Si tiene más de lo establecido, añade carne congelada magra para rebajar los límites legales. En caso contrario, se añade más grasa.
Otro detalle: el proceso de elaboración está automatizado, así que, además de controlar los niveles de humedad, proteína y colágeno, existe un sistema de eliminación de partes duras, huesos y ternillas; luego, la carne pasa por un tunes donde se ultracongela a una temperatura de menos de 18 grados. Antes de ser envasadas, las hamburguesas también pasan por un detector de metales y, para garantizar la calidad, los expertos toman muestras aleatorias que permiten comprobar su apariencia, sabor y consistencia cocinándolas en unos equipos iguales que los utilizados en los restaurantes.
Que el consumidor siga una dieta equilibrada es uno de los objetivos de la cadena. De ahí que haya creado el lema “Es lo que como y lo que hago” que pretende que el consumidor encuentre su propio nivel de equilibrio de energía. Es decir, comer la misma cantidad de calorías que utiliza durante el día. Por eso encontrará la información calórica de los menús en http://www.mcdonaldsmenu.info/.
Bocados que, antes de degustarlos, han pasado por el Food Studio, un centro de investigación asesorado por el chef Coulter. Situado en Múnich, en él se testan los nuevos productos que luego los europeos nos comemos según nuestros gustos. Buen apetito.

LA RAZÓN, Miércoles 8 de julio de 2009

lunes, 6 de julio de 2009

La nueva tarifa eléctrica se cuela en Youtube

R.BONILLA – MADRID
Las reglas de la partida han cambiado. Desde el pasado 1 de julio, la baraja con la que se juega en el mercado eléctrico tiene más cartas a repartir. La liberalización total del sector abre un nuevo escenario en el que las compañías distribuidores se dedican, en exclusiva, a la gestión de las redes, por lo que dejan atrás la actividad de venta directa de luz a los clientes finales.
De este modo, el suministro queda en manos de las empresas comercializadoras y los consumidores tienen ante sí la oportunidad de escoger entre un mayor número de cartas qué compañía quieren que les venda la luz, independientemente de quién la suministre, y según las ofertas económicas y los servicios de valor añadido ofrecidos por cada una de ellas.
Consumidores domésticos.
De cara al consumidor doméstico final, como consecuencia del cambio de regulación, la nueva “ficha” que entra en juego es la llamada Tarifa de Último Recurso (TUR), una tarifa fijada por el Gobierno que responde a una normativa establecida por la Unión Europea y cuyo objetivo es garantizar el suministro a los clientes que no quieren buscar otras ofertas en el mercado libre.
Pero, ¿quién entra en el saco de la TUR?. Aquellos consumidores que tienen una potencia contratada igual o inferior a 10 kilovatios, lo que se traduce en que prácticamente todos los consumidores domésticos, es decir, algo más de 23 millones de hogares en nuestro país.
Quienes quieran buscar ofertas en el mercado libre podrán hacerlo, mientras que los que prefieran seguir como hasta ahora, sin necesidad de realizar ninguna gestión ni papeleo, se acogerán directamente a la Tarifa de Último Recurso, que garantiza un precio mínimo al consumidor fijado por el Gobierno. El precio establecido por el Ejecutivo responde a un incremento del dos por ciento con respecto a la tarifa actual, unos 70 céntimos al mes.
El cambio más brusco llega, sin embargo, para los 1,25 millones de usuarios que tienen contratada una potencia superior a los 10 kilovatios, lo que representa el 31,7 por ciento del consumo de baja tensión. Éste es el caso de la mayoría de las pequeñas y medianas empresas, quienes deberán pasar obligatoriamente al mercado libre, por lo que quedan al margen de la Tarifa de Último Recurso.
Las pymes y usuarios con más de 10 kilovatios contratados tienen a su disposición 27 empresas comercializadoras que se encargarán de atender sus necesidades. Si el toro “ha pillado” a alguno de los usuarios que no pueden acogerse a la TUR y que no han contratado un nuevo servicio, éstos se quedarán sin suministro eléctrico, pero sí se les aplicará un recargo sobre su tarifa actual. En concreto, pasan a tener un precio transitorio que aumentará trimestralmente en torno al cinco por ciento hasta el 1 de abril de 2010.
Los cambios siempre resultan complejos. Para comprender la nueva regulación del sector eléctrico no sea misión imposible para más de la mitad de los españoles, la compañía eléctrica Endesa se ha subido al carro de las nuevas tecnologías y ha colgado en el archiconocido portal de internet Youtube un vídeo que explica en sólo 10 preguntas y respuestas, con un lenguaje sencillo y comprensible, las características de la nueva Tarifa de Último Recurso.
A tenor de las visitar recibidas en el portal de vídeos –más de 4.000 en apenas tres días de difusión-, parece que el ciudadano medio necesita aclarar aún muchas dudas, pues el bombardeo informativo que recibe provoca, en algunas ocasiones, más confusión que ayuda.
Información más sencilla.
“Dada la importancia y la complejidad de los recientes cambios en el interés que has despertado entre los consumidores finales, Endesa considera que es necesario hacer llegar una comunicación sencilla y accesible al usuario. Y ello debe realizarse por todos los medios que permiten transmitirla de manera eficaz y, por supuesto, al mayor número posible de ciudadanos”, explica Alfonso López Sánchez, director general de Comunicación de Endesa. “En este sentido, consideramos que el portal de internet Youtube es un canal muy eficaz para conseguirlo, de ahí que hayamos optado por él”, añade el responsable de la eléctrica.
En esta línea de trabajo, la compañía presidida por Borja Prado, abrió el pasado miércoles 1 de julio una nueva dirección web, www.energíaproxima.com, con el fin de poner al alcance de los clientes, asociaciones de consumidores y otros organismos implicados una información más detallada sobre todas las novedades regulatorias que se han implantado. En esta página web, aparte de otras posibilidades, el usuario puede formular dudas o solicitar el envío de documentación sobre las recientes novedades legislativas.
A partir del 10 de julio, la página incorporará las funcionalidades propias de la web 2.0, como votaciones para valorar la información recibida por la compañía o un termómetro en el que se reflejarán las inquietudes de los clientes.
Y para los consumidores más tradicionales, siempre queda la vía telefónica o informarse en las oficinas de atención al cliente de Endesa. Entre las actuaciones realizadas por la compañía en relación con estos temas, cabe destacar el reforzamiento de sus sistemas de información, las 20.000 horas de formación impartidas a las 2.000 personas que trabajan en sus servicios de atención comercial o las diversas comunicaciones escritas enviadas a sus clientes a lo largo de las últimas semanas. Asimismo, Endesa ha mantenido contactos informativos sobre las novedades regulatorias con más de 300 asociaciones y organismos públicos.
Así, cuando nos hablen de la nueva Tarifa Último Recurso, ya no hay excusas para quedarse callado. Por facilidades de información no será.

La TUR en 5 preguntas.
1. ¿Qué es la Tarifa de Último Recurso?.

Es una tarifa fijada por el Gobierno reservada para los consumidores que tienen una potencia contratada igual o inferior a 10 kilovatios. Los usuarios que lo deseen podrán ir al mercado liberalizado en el momento en que ellos quieran. Aquellos que tengan contratada una potencia superior a 10 kilovatios deberán pasar al mercado libre obligatoriamente.
2. ¿Qué cambia en el sector eléctrico?.
Desde el pasado 1 de julio existe un sistema liberalizado en el que coexisten la posibilidad de contratar el servicio con una empresa comercializadora, o para determinados consumidores, el acogerse a la TUR fijada por el Ejecutivo.
3. ¿Hay que solicitar la TUR?
No. Si el consumidor final con menos de 10 kilovatios contratados no ha realizado ninguna gestión, desde e 1 de julio su suministro ha sido automáticamente asumido por la comercializadora de último recurso de la empresa que le prestaba el servicio.
4. ¿Hay cambios en el proceso de facturación y cobro de la TUR?
La factura que el cliente recibe pasa a ser emitida por la comercializadora de último recurso sin necesidad de hacer ningún cambio. El importe será cobrado por el mismo medio de pago. En caso de avería, el usuario es atendido por su empresa distribuidora en los teléfonos habituales. Si el consumidor tiene alguna reclamación o duda con la facturación, debe contactar con la empresa comercializadora que le atiende desde el 1 de julio.
5. ¿Qué es el abono social?.
Se trata de una medida que congela la tarifa eléctrica vigente hasta el 1 de julio para los pequeños consumidores (con menos de 3 kilovatios de potencia contratada en su vivienda habitual), las familias numerosas, aquellas que tienen a todos sus miembros en el paro y los pensionistas con prestaciones mínimas.

Dos opciones para el cliente.
La nueva Tarifa de Último Recurso que entró en vigor el 1 de julio dispone de dos modalidades: sin discriminación horaria, donde la electricidad se paga al mismo precio durante todo el día, y con discriminación horaria, con horas valle donde la electricidad es más barata. Estas dos opciones ya existían en el sistema de tarifas anteriores, por los que los consumidores pueden mantener las mismas condiciones. Sólo los clientes que quieran solicitar la Tarifa de Último Recurso con discriminación horaria (y no tuvieran antes una tarifa de este tipo) deberán solicitar a sus compañías distribuidoras la instalación de un contador capaz de discernir a qué horas se hace el consumo eléctrico.
LA RAZÓN, Domingo 5 de julio de 2009